La industria turística supone el 12% del PIB y 2,5 millones de empleos directos. Indirectamente absorbe un gran porcentaje del sector servicios.

Es una actividad que lleva muchos años creciendo y ahora mismo todas las comunidades autónomas reciben gran cantidad de turistas, tanto nacionales como extranjeros. También está muy diversificada temporalmente, teniendo turismo de invierno, cultural, histórico, verano, lujo, masas, familias, jubilados…. Apenas hay alguna rama en la que no seamos líderes.

El coronavirus ha tirado todas las expectativas, planes e ilusiones del turismo de un plumazo, y en apenas unas semanas el futuro se presenta muy negro. Para empezar ya hemos perdido parte de los carnavales, las Fallas, la Feria de Sevilla, la Semana Santa, los Gay Parades…y la demanda para el verano ha caido un 90%. Esto es devastador para el turismo de costa y Baleares. Con un poco de suerte, la temporada canaria que empieza en Octubre será el principio de la reactivación. Esperemos que así sea.

Hablamos de industria turística porque realmente lo es. Son miles de empresas interconectadas e interdependientes que hacen su trabajo y dependen unas de otras. Gracias a ello pudimos atender a 83,7 millones de turistas en 2019. Somos muy competitivos en precios. Pero la industria como la conocemos tiene un problema: necesitamos grandes porcentajes de ocupación para ser rentables. Y esos porcentajes tardarán mucho tiempo en recuperarse.

Nuestra previsión es que, por distintos motivos, el turismo tardará 3 años en volver a los números de 2019. El 2020 lo damos por perdido. Puede que en 2021 venga un 60%, en 2022 un 80 y en 2023 el 100% de lo que venía en 2019.

Aguantarán las grandes cadenas que puedan cerrar algunos hoteles y mantener otros abiertos, así como los negocios con costes fijos bajos. El resto cerrará o se reconvertirá.

Las pequeñas explotaciones independientes con deudas quebrarán.

Se presenta un futuro muy negro sobre el sector, que afectará en mayor medida a las regiones más especializadas, pero que desde luego nos hará a todos más pobres.